31 de diciembre de 2008

La última página.

Es como llegar a la última página de un buen libro. Durante este año hubo personajes memorables, situaciones inolvidables y la sensación de haber experimentado parte de un relato llena de detalles interesantes. Hubo tensión, lágrimas, suspenso, risas, amor, despedidas, reencuentros y fantasías. Todo aquello que hace grande a una historia; y ésta es especial, es mi historia.

Hoy acaricio esta última página con una sonrisa. La lectura ha sido muy gratificante. Me apresto a concluir con la satisfacción de saber que ya no soy el mismo que leyó las primeras líneas. Mucho ha cambiado. Mucho se ha transformado. Mucho he aprendido. Mucho es lo que, definitivamente, queda atrás; y mucho es lo que espera por delante.

Ya cerca de concluir quiero agradecer por la buena literatura, las fronteras expandidas, los nuevos amigos, las páginas escritas, los proyectos iniciados, las lecturas realizadas, el aprendizaje interior; me siento feliz y esperanzado: no podría pedir más. Y espero que sus respectivos libros hayan sido tan vivificantes como el mío propio.

¡Feliz Año Nuevo!